Un lugar mágico por sus paisajes salvajes con la posibilidad de visitar la única colonia de Pingüinos de Penacho Amarillo más accesible de la Patagonia.

Los colores rojizos de las rocas son el ambiente perfecto para caminar rodeados de pingüinos, lobos y elefantes marinos,  y muchas aves que encuentran en este ambiente el lugar ideal para sus ciclos de vida más importantes.

Mientras recorremos la isla se aprende mucho sobre  las especies y nos gusta dar   tiempo para contemplar  en silencio escuchando sólo el canto de los pingüinos de Magallanes y de Penacho Amarillo.

En cada visita podemos ser testigos de momentos únicos…la llegada de los machos, el reencuentro de las parejas, el nacimiento de las crías o cómo se alimentan.

Un faro de más de 120 años  ilumina la historia y nos invita a viajar en el tiempo…cuando la isla fue habitada,  y mucho antes también,  cuando los antiguos navegantes pisaban por primera vez tierras patagónicas.

La navegación nos da el privilegio de recorrer parte del Parque Marino Isla Pingüino con toninas overas , delfines australes, cormoranes y albatros  que acompañan la embarcación.